En plena crisis sanitaria por el coronavirus, Coinga sigue adelante con su producción extremando las medidas de seguridad para garantizar la salud de sus trabajadores. Al ser un sector estratégico, la cooperativa menorquina no ha parado ni un momento para poder seguir abasteciendo los supermercados y tiendas con productos alimentarios de primera necesidad como son la leche, el queso y sus derivados.
Consciente de que en una isla como Menorca el transporte y llegada de suministros es vital y sensible a circunstancias ajenas a la empresa, la gerencia de Coinga ya se había preparado antes de que se decretara el estado de alarma. Así, hizo provisión de materiales, envases, fermentos, cuajos y demás elementos necesarios para que la fábrica no quedara parada en ningún momento.
La planta ya funcionaba antes en dos turnos de trabajo, pero desde que saltaron las alarmas por el Covid-19 se han modificado los horarios para que no coincidan más de 6 empleados a la vez. Las instalaciones son lo suficientemente amplias para garantizar que se respete la distancia de seguridad entre las personas; además, se han extremado aún más las medidas higiénicas como desinfecciones y limpieza. Los chóferes van protegidos y también el personal de fábrica utiliza guantes y mascarillas. En este sentido, desde Coinga agradecen el gesto de empresas y particulares como Pons Quintana y Paqui Carreras, vecina de Sant Lluís, que han confeccionado de forma altruista varias partidas de mascarillas para los trabajadores de la cooperativa.
Recordamos que la cooperativa representa al 50% del sector lácteo menorquín, un sector estratégico para la isla en cuanto a producción alimentaria y también en cuanto a mantenimiento del paisaje.